Los chopos, los sauces o salgueras y, esobre todo los alisos, constituyen auténticos bosques de galería, por cuyo eje discurre el Omaña. Tanto el cauce del río como su rica ribera acogen a multitud de especies, algunos muy singulares, como la nutria o la trucha común, que despierta pasiones entre los aficionados a la pesca deportiva.