Algunas aves acuáticas como el porrón europeo, el porrón moñudo o la cerceta común, llegan al contraembalse de Selga de Ordás a mediados de otoño y permanecen en él hasta los albores de la primavera. Estas especies son fácilmente visibles en el centro del embalse, en zonas más o menos alejadas de las orillas donde la profundidad es mayor.